Gracias por tanto

† Julián Ruiz Martorell

Los seglares, las personas consagradas y los sacerdotes, como testigos del Evangelio, desarrollamos una tarea conjunta que,  según la Memoria anual de actividades 2020 de la Iglesia  católica en España, se desarrolla en tres grandes ámbitos: 

1) Palabra (anuncio de la fe): actividad pastoral, actividad  evangelizadora, actividad educativa y actividad cultural. 

2) Liturgia (celebración de la fe): actividad celebrativa y actividad pastoral. 

3) Caridad (vivencia de la fe): actividad caritativa y asistencial. 

Son muchas las iniciativas que se llevan a cabo con la ayuda de un  gran número de personas: la actividad evangelizadora; la cooperación misionera; la labor educativa y las iniciativas de formación;  la actividad cultural; el mantenimiento y difusión del patrimonio  histórico, artístico, documental y monumental; la vitalidad de las  cofradías; las celebraciones de los sacramentos; la participación  en romerías, peregrinaciones y fiestas religiosas; el cuidado de los  templos, ermitas y santuarios; la pastoral de la salud; el trabajo  en centros sociales y asistenciales; la actividad asistencial desarrollada durante la pandemia; el esfuerzo por mitigar la pobreza; la  promoción del trabajo; la atención a inmigrantes; la defensa de  la vida y de la familia; el acompañamiento de menores y jóvenes;  la promoción de la mujer; la atención a los ancianos, enfermos  crónicos y personas con discapacidad, etc. 

Ser y sentirnos Iglesia en camino robustece los vínculos de fraternidad e impulsa a establecer lazos de amistad social y a construir puentes de ayuda recíproca.

Somos una porción del Pueblo de Dios que camina en unas con cretas coordenadas de tiempo y espacio. Somos, fundamental mente, una familia en la que no hay excluidos ni descartados.  

La Iglesia diocesana es una realidad que aprecia su pasado con  gratitud, que vive su presente con pasión y que contempla su  futuro con esperanza. Convencida de que es posible vivir en cla ve cristiana todos los acontecimientos, despliega las velas de la  nave que se siente orientada por el Espíritu Santo.  

Para ser, vivir, anunciar, celebrar y ayudar como Iglesia peregrina, se necesitan recursos económicos que se han de conseguir  con paciencia y que se han de administrar con prudencia, transparencia y equilibrio. Los recursos son limitados y las necesidades son crecientes. Los recursos son compartidos con los más  vulnerables ahora que las situaciones se vuelven apremiantes.  Los recursos son consecuencia de la generosidad de muchas personas capaces de compartir lo que tienen, lo que son, lo que  saben y lo que pueden. 

A todos: ¡muchas gracias!  

Seguimos contando con vuestra ayuda, vuestra entrega y vuestra  generosidad. 

Recibid un cordial saludo en el Señor, junto con mi bendición,

1 1 1 1 1 1 1 1 1 1

Artículos Destacados